XI
LO SOL.
Nec est qui se abscondat à calore Ejus.
(Salm XVIII, verset 8.)
¿Veys
lo Sol qu´ara guayta,
Y desde´l Cel envía
Son raig sobre
nosaltres benfactor?
“¡Quína alegría!”, exclamam
Les
criatures totes,
Descubrint al gran Astre enlluernador.
XI
EL
SOL.
¿Veis el Sol que asoma, y desde el Cielo nos manda su rayo bienhechor? - “¡Oh alegría!”, exclaman todas las criaturas, al descubrir el radiante Rey de los Astros.
Y
es que ab dolça mirada
L´ull del Sol les contempla,
Y les
tramet de la Bellesa´l riu;
Y entra dins llurs entranyes,
Y ab
ardor poderosa
De la vida conserva´ sant caliu...
Com lo
bell Sol un Altre
Sol resplendent nos mira,
La Humanitat
sentintne l´escalfor:
¡Deu!, ¡Deu!; Sol veritable,
Qui en
tot moment ens dona
La vida de la Fe, lo goig d´Amor.
Agost 1873.
Y
es que con dulce mirada el Sol las contempla cariñoso, y las
envuelve en el río de la Belleza; entra en sus entrañas, y, con
eficaz ardimiento, conserva el sacro fuego de la vida...
Como
el bello Sol de la naturaleza, otro Sol resplandeciente nos mira; la
Humanidad siente su calor divino: ¡Dios! ¡Dios!; verdadero Sol de
las almas, que á cada momento nos da la vida de la Fe, las dulzuras
del Amor.